La ayuda a los demás es mucho más que un acto de bondad. Es una ley de equilibrio, una ley de compensación y un catalizador energético tan potente que no os lo podéis ni imaginar
Muchas personas creen que para desbloquear su propia energía tienen que buscarla y acumularla para ellas mismas. Pero la solución a este problema, es que cuanto más damos, más recibimos. La energía estancada se vuelve tóxica y crea bloqueos, como el agua en una balsa. La energía que fluye, que se comparte, se vuelve pura y se multiplica como el agua de un río que da vida a todo lo que toca
Si practicamos la ayuda a los demás, nuestra energía fluirá como un río hacia el mar
La energía debe moverse, debe fluir
La ayuda a los demás no sólo se trata de dar cosas materiales, porque la mayor riqueza que se puede dar no está en el bolsillo, está en el corazón
La ayuda a los demás puede ser una palabra amable a quien lo está pasando mal, el escuchar atentamente a quien necesita desahogarse, sonreír de forma sincera a alguien
El perdonar a quien nos ha ofendido, nos libera a nosotros mismos de la presión del rencor. Es la paciencia que nos permite atender y escuchar los problemas de los demás, sabiendo que cada uno de nosotros tenemos nuestros propios problemas
Escuchar a aquellas personas que ya tienen juventud acumulada, que tienen un montón de experiencias y sabiduría a través de la vida que han tenido, el ayudar a los demás puede hacerse de muy diferentes formas
Compartir una vivencia de superación con alguien más joven que está pasando por algo parecido es un acto de inmensa ayuda
No alterarse, cuando se está en pleno conflicto e intentar mantener la paz cuando otros quieren más pelea, es conseguir un buen puñado de energía curativa
También cuidar de un animal, de una planta o solamente, enviando pensamientos de amor y paz al mundo durante unos minutos al día, son todas formas de ayuda a los demás
Que quede bien claro que, no usamos nuestra propia energía. Nosotros nos convertimos en canales de una energía mucho más grande. Cualquier acto que realicemos hacia los demás después podemos sentir una energía mucho más grande de la que hemos dado
El ayudar a los demás es la forma más elevada de cuidarse espiritualmente
Empieza hoy mismo, busca algo en lo que puedas ser útil a alguien, no tiene que ser al grandioso, simplemente puede ser una llamada a un amigo que se siente solo. Preparar una comida con amor para tu familia u ofrecer una oración sincera para aquellas personas que sufren en el mundo
Cada acto de ayuda sincera es una declaración al universo de que tu eres un canal de luz y el universo te responde llenando ese canal con más luz de la que jamás podrías contener por ti mismo
Que tengas un alegre y amoroso día
Un abrazo de luz
Susana
El camino de los abedules
Sanación Espiritual Energética