La energía de la que todos y todo está compuesto se mueve y fluye
El universo es abundante y nos llega de infinidad de formas, cuando aprendemos a aceptar esta abundancia que nos da la Energía Creadora de Todo lo que Es, también deseamos compartirla, y eso se produce cuando nos hacemos conscientes de que al permitir que fluya nuestra energía, dejamos sitio para que pueda entrar más
Cuando a través de mi doy energía en una sanación, a la vez yo también estoy recibiendo energía, elevándome espiritualmente por encima de todos y de todo…
Cuando por miedo o por creencias tenemos el convencimiento de que “no hay suficiente para todos”, lo único que hacemos es apegarnos a todo lo que tenemos y esa corriente de energía deja de funcionar y de esa manera, no permitimos que entre más abundancia en nuestra vida
Si damos, la energía se transforma en amor, afecto, aprecio, reconocimiento, bienes materiales, dinero, amistad, etc.
Si te fijas en todos aquellos que no se encuentran bien o son desgraciados, descubrirás que, a menudo, se trata de personas que desean algo externo de forma muy insistente y por lo tanto les guía la avaricia
Estas personas creen que los demás y la vida en general no les dan lo que necesitan, hacen como esas plantas que se agarran a su huésped, normalmente árboles, y les absorben toda su energía, y al final acaban matándolos. Esas personas ansían tanto que otra persona o cosa le de amor, y la satisfacción que necesitan, que no se están dando cuenta que están matando la fuente de suministro, es decir, acaban con una relación amorosa, una amistad, un trabajo, una familia, etc.
Estas personas buscan el sentirse bien en el exterior, cuando verdaderamente, el amor, la felicidad…, viene del interior, de tu Ser no Físico, de tu conexión con la Fuente Universal
Cuando descubrimos en nosotros mismos el amor incondicional, cuando descubrimos que no debemos depender de los demás para sentirnos bien, entonces es cuando podemos darnos a los demás, y esto hace que recibamos más de lo mismo, el Universo es muy generoso
No creas que el hecho de dar tiene algo que ver con el sacrificio, el sentido del deber o con cualquier idea de espiritualidad, sino por el puro placer de dar, porque es un acto alegre que sólo puede proceder de un lugar de puro amor
Todos, absolutamente todos tenemos una fuente infinita de amor y felicidad en nuestro interior
Se nos ha enseñado que tenemos que conseguir cosas que están fuera de nosotros para ser felices, cuando en verdad es totalmente lo contrario, y es por eso que debemos aprender a contactar con nuestra fuente interna de felicidad y amor y dejar que fluya hacia fuera para compartirla con los demás. Hazlo para sentirte realmente bien, no por complacer a los demás
Si dejamos fluir hacia fuera el amor que llevamos dentro, estamos liberando espacio para que, entre más de lo mismo en nosotros, y cuanto más practicamos más queremos dar, y cuanto más damos de nosotros mismos más recibimos de los demás. El hecho de dar ya es la propia recompensa
Cuando fluyes hacia afuera, has de ser consciente de lo que haces para poder experimentar lo bien que te hace sentir esto
1- Puedes expresar a los demás el aprecio que sientes por todo lo que son y lo que hacen
Si quieres puedes hacer una lista de las personas a quien quieres hacer llegar tu amor y tu aprecio, y puedes pensar en cómo hacérselo llegar, puedes hacerlo mediante palabras: “aprecio mucho que quieras estar conmigo”, “te agradezco la comida que me preparas todos los días”, etc., también puedes abrazar, puedes dar un regalo, puedes llamar y decírselo, enviar una carta o mail, dar dinero o cualquier otro medio que se te ocurra, todo es válido mientras te sientas bien haciéndolo, aunque te resulte difícil hazlo. Prueba de expresar abiertamente y sin miedo, el agradecimiento, el amor, la estima, la admiración que sientes hacia los demás si así lo sientes. No te avergüences de decir estas cosas
2- Rebusca entre las cosas que tienes y cuando encuentres algunas que no quieres o que uses poco, regálalas a otros que vayan a apreciarlas más
3- Si eres de las personas de las que gastas los menos posible y que siempre vas en busca de ofertas, un día trata de gastar un poco más, compra productos más caros, concediéndote algún capricho, de vez en cuando, también puedes invitar a algún amigo a tomar café, o puedes donar dinero por una buena causa, etc.
Estos pequeños gestos te demuestras a ti misma/o que crees en la abundancia…
4- Puedes donar algo de tus ingresos, a la gente necesitada, puedes comprar productos y entregarlos al banco de alimentos, etc., es una forma de alimentar a tu energía, y de esta forma reconoces que todo lo que recibes procede del universo, y que, por lo tanto, tú devuelves una parte a la fuente universal. Da lo mismo que cantidad o parte des, incluso un 1% de lo que ingresas es suficiente para sentir que estás dándote a los demás.
5- Se una persona creativa. Piensa en otros medios de mover la energía hacia el universo por tu propio bien y para el bien de los demás
6 – Apreciar también es una forma de darte hacia afuera, apreciar las cosas que tienes, las personas con quien tienes cualquier tipo de relación, por los animales, la naturaleza, etc.
Te deseo que tu vida sea maravillosa
Un abrazo,
Susana